En este artículo recogemos algunos consejos para hacer tu hogar un lugar más "pet friendly".
- Espacio adecuado. Es importante enseñar a nuestra mascota en qué zonas de la casa puede transitar y en cuáles no. Eso sí, asegúrate de que tenga suficiente espacio para moverse y explorar. También crea un área designada específicamente para ellos con, una cama cómoda y sus juguetes.
- Elimina objetos peligrosos. Revisa tu hogar para eliminar cualquier objeto peligroso para tu mascota, como plantas tóxicas, cables eléctricos al alcance o productos de limpieza accesibles. Mantén estos elementos fuera de su alcance o utiliza protectores para evitar accidentes.
- Protege tus muebles. Si permites que tu mascota suba a los muebles, considera cubrirlos con fundas lavables para protegerlos de pelos y manchas. En el caso que se trate de un gato, es recomendable colocar rascadores o postes para que puedan afilar sus uñas y evitar así, que pueda dañar tus muebles.
- Zona de alimentación adecuada. Establece un lugar designado para la alimentación de tu mascota. Lo ideal sería un lugar tranquilo sin ruidos excesivos u olores extraños que le puedan alterar y situados lejos de su zona de descanso.
Es esencial elegir los recipientes adecuados para cada animal y, si tienes varias mascotas, cada una debe tener su propio plato con comida y agua. En el mercado hay platos antideslizantes para evitar derrames y facilitar su acceso. Asegúrate de tener siempre agua fresca disponible. - Juguetes y entretenimiento. Deja al alcance de tu mascota juguetes para mantenerlo entretenido. Procura que tenga variedad y que sean apropiados según su raza y edad, esto evitará que se aburran y desarrollen comportamientos destructivos.
- Limpieza. Si tienes una mascota que suelta mucho pelo, es importante tener una rutina de limpieza. Aspira y cepilla regularmente para mantener tu hogar limpio y reducir la cantidad de pelo en el ambiente.
También es esencial mantener la higiene de los objetos de tu mascota, como el comedero y bebedero, su cama, sus juguetes, etc., para evitar la propagación de bacterias, hongos y parásitos. Pero debes tener cuidado con los productos de limpieza que uses, porque algunos pueden resultar tóxicos o tener fragancias demasiado fuertes para nuestras mascotas.
En el caso de tener gatos, hay que tener más cuidado con la limpieza del hogar, ya que son animales muy territoriales y marcan olfativamente frotándose con los objetos o rascándolos. Limpiar con demasiada asiduidad puede generarles estrés, ya que dejarán de sentir que es su territorio. - Seguridad en el exterior. Si tu mascota pasa tiempo en el exterior, asegúrate de tener un espacio seguro y libre de peligros. Mantén las puertas y las vallas cerradas para evitar que escapen y se pierdan.
En el caso de los gatos, asegúrate bien de proteger las ventanas o balcones con redes especiales que evitan su salida al exterior o posibles caídas, si no quieres llevarte algún susto. - Espacio para sus necesidades. Si tienes un cachorro, ya que no es recomendable comenzar las salidas hasta que tenga las vacunas necesarias, hay que establecer un lugar determinado donde pueda hacer sus necesidades y acostumbrarle a que use el empapador. Puedes ayudarte de productos atrayentes que genera una sensación agradable a tu mascota hacia a la superficie tratada.
En el caso de gatos, deberás colocar el arenero en un lugar tranquilo y apartado. Y si tienes varios gatos, asegúrate de que puedan disponer de un arenero para cada uno. - Amor y atención. Por último, pero no menos importante, asegúrate de brindar a tu mascota amor y atención. Pasa tiempo de calidad con ella, juega, acaríciala y demuéstrale cuánto la quieres. Esto fortalecerá vuestro vínculo y hará que tu hogar sea aún más acogedor para tu amigo peludo.
Hacer de tu hogar un lugar pet friendly es una forma de asegurar el bienestar y la felicidad de tu mascota. ¡Tu mascota te lo agradecerá con amor incondicional!