Clichés sobre nuestras mascotas: qué es verdad y qué es mentira

Son muchas las informaciones falsas o medias verdades que se escuchan de vez en cuando… A veces las comentan dueños de mascotas y otras veces incluso salen en los medios de comunicación en cuyo caso, se supone que contrastan sus fuentes.

Algunas las hemos visto en anteriores artículos, otras igual ni las habíais oído, pero en este mundo sobreinformado en el que vivimos, hay que tener mucho cuidado con la información que nos llega. Por supuesto, yo os aconsejo que no deis credibilidad a nada que no venga de fuentes expertas y contrastadas.

Y por supuesto poned en cuarentena comentarios de conocidos del tipo “He oído en el parque que…” o el clásico “Se ha hecho toda la vida y nunca ha pasado nada…”.

A continuación, os pongo unos cuantos comentarios que hacen alusión a estos clichés. Son comentarios que suelen surgir en la clínica y que seguro que dentro de veinte años seguirán surgiendo:

  • El clásico perro comiendo un enorme hueso: “Es lo que se ha hecho toda la vida, darle al perro las sobras de nuestra comida incluidos los huesos”, ERROR

La realidad es que los perros suelen tener un estómago más sensible que el nuestro, y sobre todo ante cambios drásticos de alimentación. Hay una serie de alimentos que no recomendamos que no se den nunca: chocolate, bollería industrial, fritos, azúcar, salsas elaboradas, leche… (En el artículo Diez Alimentos que jamás debes darle a tu perro tenéis un buen resumen) Se prohíben todos los huesos, en especial los de pollo que tienen más facilidad para astillarse y producir perforaciones y obstrucciones. Por lo general el perro debe comer exclusivamente su pienso. Hay perros a los que se les aconseja dar arroz hervido con pollo hervido, siempre deshuesado, y a veces se puede añadir alguna verdura, pero siempre bajo prescripción y explicación de vuestro veterinario. También, y de forma esporádica o como premio se les puede dar algún trozo de pan duro o manzana para ayudar a la higiene dental, pero repito que de forma muy esporádica. 

  • El equivalente a lo anterior, pero en el gato: El clásico gato con su raspa de sardina u otro pescado (merluza…), ERROR.

Los veterinarios recomendamos dar únicamente pienso o algo de comida húmeda a los gatos. No dar tampoco leche, y menos entera, ya que tiene demasiada nata y le puede alterar el estómago. Las espinas del pescado se le pueden clavar al gato en la garganta o incluso en el intestino, es realmente peligroso.

  • Los gatos siempre caen de pieFALSO.

Los gatos tienen un sistema interno que les ayuda a orientarse y a intentar colocarse de la mejor manera para caer al suelo, pero no es del todo fiable, en especial si no se les da el tiempo suficiente para la colocación. Por eso a veces es peor una caída de media distancia que una de gran altura, porque no ha podido colocar su cuerpo del todo.

Supongo que parte de este bulo está relacionado con otro muy diseminado también: 

  • Las siete vidas que tienen los gatos, tan FALSO como el anterior.

En este artículo: ¿Tienen los gatos siete vidas? lo explico todo con un poquito más de detalle.

  • Los perros ven en blanco y negro: FALSO. Estudios prácticos han demostrado que pueden identificar el azul, verde, amarillo, naranja, gris o rojo.

En el tema de la castración también se oyen toda clase de bulos, entre los que os destaco:

  • Es necesario que la perra gata haya tenido una camada por lo menos una vez en la vida antes de castrarla: FALSO.

Se les puede castrar en cualquier momento incluso sin haber criado nunca. De hecho, en general recomendamos castrarlos antes del primer o segundo celo para evitar ciertos problemas hormonales que pueden derivar en quistes ováricos y tumores de mama, entre otros. 

  • Los perros al castrarlos se ponen gordos: FALSO A MEDIAS. 

No es que se pongan gordos por una cambio genético o fisiológico, es que a veces están más tranquilos y entonces queman menos calorías en los juegos con los otros perros y perras. Se soluciona de una manera muy sencilla: controlando la dieta. A cambio notaréis menos problemas en su comportamiento al rebajar la dominancia y la territorialidad del animal. 

  • Los animales (tanto perros y perras como gatos y gatasa ser castrados pierden sus instintos naturales y dejan de ser lo que son: FALSO

Un perro o gato no deja de tener su comportamiento animal simplemente por la castración. Mantiene las ganas de jugar, de correr, de cazar, de moverse…así como las ganas de relacionarse con otros de su especie o de diferente especie. 

Perdonad tanta referencia, pero es importante aclararlo y que no os quedéis con ninguna duda. En este artículo explico todo lo anterior y además ofrezco algunos consejos para sobrellevar la situación: 4 consejos para hacer frente al celo de nuestra perrita.

Continuamos con el clásico cliché de la convivencia entre nuestras especies favoritas:

  • Los gatos y losperrosno pueden vivir juntos: FALSO. 

La famosa frase de “como el perro y el gato” no siempre se cumple. De hecho, es muy frecuente que sean grandes amigos. En los casos en los que conviven con tranquilidad suele ser el gato el dominante sobre el perro, a pesar de ser de un tamaño muy inferior.

En este bonito artículo de nuestra experta criadora de gatos Alejandra Nussbaum, explica cómo conviven los felinos con otras especies: La convivencia del gato con otras especies.

Otros bulos frecuentes que tienen que ver con los perros de razas potencialmente peligrosas (PPP): 

  • Los perros de razas potencialmente peligrosas tarde o temprano terminan siendo agresivos: FALSO. Tanto los perros de estas razas como los de razas que no están entre las potencialmente peligrosas, no tienen por qué dar ningún problema con una educación adecuada. No hay nada que haga a estos animales más agresivos que el resto, lo único que siempre es más peligroso el mosdisco de un perro de estas razas porque suelen tener una mordida más grande que la de los demás.
  • Los dóberman tiene un hueso en el cráneo que crece hacia dentro y por eso con los años se vuelven locos: FALSO. No creo que haga falta más explicaciones...
  • Los dóberman (muy afamados como veis) no reconocen a sus dueños por la nocheFALSO. Tampoco daré una mayor explicación porque es una premisa sin pies ni cabeza.

Por último, quiero hacer mención a ciertas noticias que nos suelen llegar vía online ya sea a través de publicidad o mensajes en el ordenador o el móvil: 

  • Mucho cuidado con los mensajes de camadas de perritos gatitos que se regalan o que van a ser sacrificados si no los acoges. Muchos de ellos vienen sin detallar la ciudad o incluso el país de origen de la camada. Parecen mensajes para llamar la atención de la gente detrás de cualquier otra intención, por favor tened cuidado y contrastad bien la fuente. A mí alguno me vuelve a llegar cada tres o cuatro años…
  • Muchas veces tampoco son ciertos (de hecho, a mí me ha llegado en más de diez ocasiones mensajes en distintos parques de Madrid siendo siempre falsos) los mensajes alertando sobre posibles envenenamientos en el barrio. A veces con cianuro, otras con arsénico y otras mediante trocitos de cuchillas de afeitar escondidas en albóndigas o comida de perro. Sin duda el primero en tener el conocimiento será el veterinario de la zona, una simple pregunta y seguro que os dejará tranquilos. 

Por favor, sed prudentes y no contribuyáis, en la medida de lo posible, a difundir nada cuya veracidad esté mínimamente cuestionada. 

Por último, un único mito precioso que SÍ que es real: Los gatos tricolor son (casi) siempre hembras. De nuevo, la experta criadora de gatos de Vitakraft explica este alucinante dato en el siguiente artículo: Los gatos tricolores...¿son todas hembras?

Hasta aquí llega el artículo de este mes, una buena dosis de realidad para que nos desengañemos y sobre todo tengamos ánimo de contrastar cualquier información que nos llegue con los profesionales en el campo.

Para despedirme os dejo una frase que a mí siempre me hace reflexionar y que creo ideal para esta ocasión:

 

“El hombre es el único animal que come sin tener hambre, bebe sin tener sed y habla sin tener nada que decir.”

Mark Twain